Serenos de Punchana detienen a tres barristas menores de edad en plena vía pública

• Provocaban caos entre pandillas en sector de Independencia

La creciente inseguridad en el distrito de Punchana volvió a evidenciarse cuando tres adolescentes, presuntamente vinculados a actos vandálicos, fueron detenidos por los serenos locales durante un patrullaje de rutina en la prolongación Independencia. Este operativo, que contó con el apoyo del Grupo de Intervención Rápida (GIR), terminó con la intervención de los menores, quienes alteraban el orden público, sembrando temor en la comunidad.

Cerca de las 10:30 p.m., de ayer, la central de emergencias recibió múltiples llamadas de vecinos alertando sobre la presencia de un grupo de jóvenes que, aparentemente, pertenecían a una barra brava y estaban provocando disturbios en las calles. De inmediato, el personal de Serenazgo, junto con el GIR, se desplazó al lugar, logrando controlar la situación y detener a tres menores, identificados de 16 y 14 años.

Los adolescentes, que intentaron huir al notar la presencia de las autoridades, fueron reducidos rápidamente y trasladados a la comisaría de Punchana para las diligencias correspondientes. Según fuentes policiales, los menores podrían estar involucrados en otros incidentes similares, lo que ha generado preocupación entre los vecinos.

El distrito de Punchana ha sido escenario de un incremento en la violencia juvenil, especialmente en sectores vulnerables como la prolongación Independencia, donde las pandillas y barras bravas han encontrado un terreno fértil para sembrar el caos. Este fenómeno, alimentado por la falta de oportunidades y la desintegración familiar, ha convertido a muchos jóvenes en protagonistas de delitos que, en ocasiones, culminan en tragedia.

La intervención de los serenos y el GIR es un esfuerzo por parte de las autoridades para frenar esta ola de delincuencia juvenil, que no solo afecta la seguridad ciudadana, sino que también plantea un reto significativo en términos de política social y rehabilitación de menores infractores.

Tras la detención, los menores fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Familia, que determinará las medidas correctivas a seguir. Según la ley peruana, los adolescentes serán sometidos a un proceso de evaluación que podría incluir desde la libertad vigilada hasta su internamiento en un centro de rehabilitación para menores, dependiendo de los antecedentes y la gravedad de los hechos.

Por su parte, las autoridades del distrito han reafirmado su compromiso de intensificar los patrullajes y operativos en las zonas más conflictivas, con el fin de prevenir nuevos incidentes y garantizar la paz en la comunidad.

El caso de estos tres menores es solo un reflejo de una problemática más profunda que afecta a Punchana y, en general, a muchas otras partes de la región. La intervención oportuna de los serenos y del GIR ha evitado que los actos vandálicos escalen, pero queda claro que se necesita un enfoque integral que combine la acción policial con políticas públicas orientadas a la prevención y la inclusión social de los jóvenes. La población, que ha visto un deterioro en su calidad de vida debido a estos eventos, espera que las autoridades mantengan su firmeza en la lucha contra la delincuencia juvenil, y que se tomen las medidas necesarias para evitar que otros adolescentes sigan este mismo camino.